23/10/09

Año Sacerdotal


19 JUNIO 2009 / 19 JUNIO 2010


El Papa Benedicto XVI ha convocado a un Año Sacerdotal con motivo del 150 aniversario de la muerte de San Juan María Vianney, el Santo Cura de Ars, “verdadero ejemplo de pastor al servicio del rebaño de Cristo”, a quien proclamará patrono de todos los sacerdotes del mundo.


La apertura de este Año Sacerdotal fué programada para el 19 de junio de este año, donde monseñor Manuel Camilo Vial y todo el Presbiterio diocesano invitan a esta celebración en el Templo Catedral de Temuco en la solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús y Jornada de Santificación Sacerdotal. El Papa lo clausurará justo un año después, con un “Encuentro Mundial Sacerdotal” en la Plaza de San Pedro.


Durante este Año Jubilar, está prevista la publicación de un “Directorio para los Confesores y Directores Espirituales” y de una “recopilación de textos del Papa sobre los temas esenciales de la vida y de la misión sacerdotal en la época actual”.

OBJETIVOS Y SIGNIFICADO

Este año sacerdotal, cuyo lema es “Fidelidad de Cristo, fidelidad del sacerdote”, tiene dos grandes objetivos: el primero es “ayudar a percibir cada vez más la importancia del papel y de la misión del sacerdote en la Iglesia y en la sociedad contemporánea” y el segundo es “la necesidad de potenciar la formación permanente de los sacerdotes”, la cual debe ser integral, teniendo como gran horizonte la búsqueda de la santidad, la cual repercutirá en la eficacia de su ministerio.


En este tiempo de renovación que es la Misión Continental, este año sacerdotal está llamado a ser para todos un tiempo de gracia. Para los laicos será un tiempo para crecer en la valoración de la persona del sacerdote y de su misión en la Iglesia, renovando la amistad con sus pastores y apoyándolos con la oración. Además será la ocasión para crecer en la conciencia de la necesidad de orar por las vocaciones a la vida sacerdotal y por los seminaristas que están en camino hacia el sacerdocio.


Para los sacerdotes de esta será un tiempo de agradecimiento a Dios, de escucha, de reflexión, de conversión, en general, de crecimiento.

AÑO DE CRECIMIENTO PARA LOS SACERDOTES


En reiteradas ocasiones el Papa ha dirigido palabras muy profundas a los sacerdotes, alentándolos y llamándolos a la fidelidad, como cuando anunció la convocación de este Año Sacerdotal.


En una homilía de una ordenación sacerdotal en Roma, en abril de 2007, S.S. Benedicto XVI sintetizó la misión del sacerdote y planteó cuatro elementos fundamentales en su vida.


La misión de los sacerdotes es la misión de Cristo, de la cual participan por el Sacramento del Orden y están “llamados a esparcir la semilla de su Palabra, a dispensar la misericordia divina, y a alimentar a los fieles en la mesa de su Cuerpo y de su Sangre”. Para poder vivir este ideal, el Papa recalca cuatro elementos fundamentales en la vida de todo sacerdote. Ellos son:


- La Eucaristía: El altar será «vuestra escuela cotidiana de santidad, de comunión con Jesús, de la manera de penetrar en sus sentimientos».


- La Palabra: «Si le escucháis dócilmente, si le seguís fielmente, aprenderéis a traducir en la vida y en el ministerio pastoral su amor y su pasión por la salvación de las almas».


- La bondad del Señor: «Que la certeza de que Cristo no nos abandona y de que ningún obstáculo podrá impedir la realización de su designio universal de salvación sea para vosotros motivo de constante consuelo, en particular en el día de dificultad, y de inquebrantable esperanza».


- La alegría: «A pesar de las incomprensiones y contrastes, el apóstol de Cristo no pierde la alegría, es más, es el testigo de esa alegría que surge de estar con el Señor, del amor por Él y por los hermanos».

10/10/09

Virgen del Pilar, patrona de la humanidad


VIRGEN DEL PILAR 12 DE OCTUBRE


Miles de zaragozanos y visitantes se agolpan en las calles de la ciudad para presenciar el desfile inaugural de las fiestas. La atención se centra en el balcón principal del Ayuntamiento; desde donde tiene lugar el acto del pregón de fiestas.

Ofrenda de Flores y de Frutos , Rosario de Cristal. El día 12 de octubre, día del Pilar, tiene lugar la multitudinaria Ofrenda de Flores, uno de los actos más importantes de todos los que se celebran en toda España, ese mismo día de madrugada se celebra el rezo del Rosario de la Aurora.

La jornada del 13 de octubre se abre con la Ofrenda de Frutos y, al anochecer, tiene lugar la procesión del Rosario de Cristal que recorre con sus faroles y carrozas las calles de Zaragoza.

HISTORIA DE LA VIRGEN DEL PILAR

La tradición, tal como ha surgido de unos documentos del siglo XIII que se conservan en la catedral de Zaragoza, se remonta a la época inmediatamente posterior a la Ascensión de Jesucristo, cuando los apóstoles, fortalecidos con el Espíritu Santo, predicaban el Evangelio. Se dice que, por entonces (40 AD), el Apóstol Santiago el Mayor, hermano de San Juan e hijo de Zebedeo, predicaba en España. Aquellas tierras no habían recibido el evangelio, por lo que se encontraban atadas al paganismo. Santiago obtuvo la bendición de la Santísima Virgen para su misión.

Los documentos dicen textualmente que Santiago, "pasando por Asturias, llegó con sus nuevos discípulos a través de Galicia y de Castilla, hasta Aragón, el territorio que se llamaba Celtiberia, donde está situada la ciudad de Zaragoza, en las riberas del Ebro.

Allí predicó Santiago muchos días y, entre los muchos convertidos eligió como acompañantes a ocho hombres, con los cuales trataba de día del reino de Dios, y por la noche, recorría las riberas para tomar algún descanso".
En la noche del 2 de enero del año 40, Santiago se encontraba con sus discípulos junto al río Ebro cuando "oyó voces de ángeles que cantaban Ave, María, gratia plena y vio aparecer a la Virgen Madre de Cristo, de pie sobre un pilar de mármol".

La Santísima Virgen, que aún vivía en carne mortal, le pidió al Apóstol que se le construyese allí una iglesia, con el altar en torno al pilar donde estaba de pie y prometió que "permanecerá este sitio hasta el fin de los tiempos para que la virtud de Dios obre portentos y maravillas por mi intercesión con aquellos que en sus necesidades imploren mi patrocinio".

Desapareció la Virgen y quedó ahí el pilar. El Apóstol Santiago y los ocho testigos del prodigio comenzaron inmediatamente a edificar una iglesia en aquel sitio y, con el concurso de los conversos, la obra se puso en marcha con rapidez. Pero antes que estuviese terminada la Iglesia, Santiago ordenó presbítero a uno de sus discípulos para servicio de la misma, la consagró y le dio el título de Santa María del Pilar, antes de regresarse a Judea. Esta fue la primera iglesia dedicada en honor a la Virgen Santísima.

Muchos historiadores e investigadores defienden esta tradición y aducen que hay una serie de monumentos y testimonios que demuestran la existencia de una iglesia dedicada a la Virgen de Zaragoza. El mas antiguo de estos testimonios es el famoso sarcófago de Santa Engracia, que se conserva en Zaragoza desde el siglo IV, cuando la santa fue martirizada. El sarcófago representa, en un bajo relieve, el descenso de la Virgen de los cielos para aparecerse al Apóstol Santiago.

Asimismo, hacia el año 835, un monje de San Germán de París, llamado Almoino, redactó unos escritos en los que habla de la Iglesia de la Virgen María de Zaragoza, "donde había servido en el siglo III el gran mártir San Vicente", cuyos restos fueron depositados por el obispo de Zaragoza, en la iglesia de la Virgen María. También está atestiguado que antes de la ocupación musulmana de Zaragoza (714) había allí un templo dedicado a la Virgen.

La devoción del pueblo por la Virgen del Pilar se halla tan arraigada entre los españoles y desde épocas tan remotas, que la Santa Sede permitió el establecimiento del Oficio del Pilar en el que se consigna la aparición de la Virgen del Pilar como "una antigua y piadosa creencia".


BASÍLICA DEL PILAR






La Basílica del Pilar es uno de los santurarios marianos más importante del mundo católico, hasta el que llegan anualmente miles de peregrinos. Es también un centro artístico de primer orden que reune obras de gran valor y de diferentes épocas.

A orillas del río Ebro se levanta la imponente Basílica del Pilar, joya del arte barroco en Aragón. Sucede este templo al construido en 1515, en estilo gótico, y que a su vez, sucedió al románico destruido por un incendio en 1443.

Según una venerable y antiquísima tradición, la Virgen María, cuando todavía moraba en Jerusalén antes de su gloriosa Asunción a los cielos, vino a Zaragoza a consolar al Apóstol Santiago. Éste se encontraba con los primeros convertidos a las orillas del río Ebro predicando el Evangelio. Desde tiempo inmemorial estos hechos se sitúan en la noche del 2 de enero del año 40 de la era cristiana. Ella trajo la Columna o Pilar para que sobre él se construyera la primera capilla que de hecho sería el primer templo Mariano de toda la cristiandad.

La construcción de la actual Basílica del Pilar está íntimamente ligada al aumento de la devoción pilarista a lo largo del siglo XVII. El anterior edificio gótico-mudéjar se queda pequeño ante el creciente número de fieles y se hace necesario levantar un nuevo templo grandioso y monumental, más acorde con el nuevo espíritu triunfante de la Iglesia de la Contrarreforma y con la recien adquirida categoría de concatedral. Se promueve una campaña popular en favor de la nueva construcción que pronto da sus frutos, y ya en 1674 el Cabildo decide tomar la iniciativa de las obras.

La fisonomía actual del Pilar es el resultado de un largo proceso constructivo que se inicia con el proyecto del zaragozano Felipe Sánchez, revisado posteriormente por Herrera el Mozo, arquitecto de Carlos II. La intervención del arquitecto real Ventura Rodríguez a partir de 1750 fue decisiva: renueva la decoración interior según las nuevas corrientes clasicistas de la época y diseña la Santa Capilla y el Coreto, y remodela el trazado exterior con cúpulas añadidas a la central -que en un principio se había pensado que iba a ser la única- y torres que no se terminarán hasta mediados de nuestro siglo. Así contemplamos desde cualquier perspectiva un impresionante edificio de características singulares por sus dimensiones, por la severidad del ladrillo empleado, de raíz mudéjar, por la policromía de las tejas de sus cúpulas y el aire bizantino que respira su estructura de cubrimiento.

El interior es de una gran belleza y una serena grandiosidad. Toda la traza del templo está acomodada a la idea, siempre defendida por la Cabildo del Pilar, de no mover de su sitio la Sagrada Columna de la Virgen. Es una planta de salón espaciosa con tres naves de igual altura. Los muros se animan con los motivos clasicistas diseñados por Ventura Rodríguez: pilastras, hornacinas, guirnaldas, palmas y ángeles tenentes. La Santa Capilla es un espacio sagrado concebido como un escenario donde se funden todas las artes, una exaltación de María a través de los sentidos, con la persuasión propia de la retórica del barroco. Los ricos materiales, jaspes, mármoles y bronces, se funden con la decoración escultórica y la pintura de su cúpula. En el altar se representa la escena de la Venida de la Virgen ante Santiago y los primeros Convertidos, obra de José Ramírez de Arellano que muestra una clara influencia del barroco romano y en concreto de Bernini.

OFRENDA FLORAL A LA VIRGEN


CAMARIN


3/10/09

San Francisco de Asís, 4 de Octubre



Se celebra el 04 de octubre.Fundador de la orden franciscana. San Francisco de Asís predicó la pobreza como un valor y propuso un modo de vida sencillo basado en los ideales de los Evangelios. Con el tiempo, el número de sus adeptos fue aumentando y Francisco comenzó a formar una orden religiosa, la de los franciscanos. Además, con la colaboración de santa Clara, fundó la rama femenina de su orden, que recibió el nombre de clarisas.
Francisco Bernardone nació en Asís, Italia, en el año 1182. Sus padres fueron Pietro Bernardone y Madonna Pica. Siendo joven participó en la guerra entre las regiones de Perusa y Asís, en 1202, y en la batalla de Collestrada fue tomado prisionero y liberado al año siguiente. En 1205 se enroló nuevamente en el ejército y partió a la guerra, pero en el trayecto tuvo un sueño en el que una voz le ordenó volver y dar otro rumbo a su vida. Entonces comenzó su conversión: se apartó de los amigos, frecuentó la compañía de los pobres e intensificó la vida de soledad y oración.

En 1206, a la edad de 24 años, renunció a las riquezas y a su familia, y se trasladó a la localidad de Gubbio para servir a los leprosos. De regreso en Asís, vistió el hábito de ermitaño y trabajó en la restauración de las ermitas de San Ubicación de la ciudad de Asís Damián, San Pedro y Santa María de los Ángeles (también llamada la Porciúncula).

En 1208, mientras oía misa en la Porciúncula, escuchó el evangelio del envío de los discípulos en misión y descubrió su vocación evangélica y apostólica. Empezó a predicar la paz, la igualdad entre los hombres, el alejamiento de la riqueza, la dignidad de la pobreza, el amor a todas las criaturas y la venida del Reino de Dios. Entonces se le unieron los tres primeros compañeros: Bernardo de Quintavalle, Pedro Cattani y Gil de Asís, con quienes nace la I Orden Franciscana.

En 1209 escribió la primera Regla de la Orden, que dictaba el estilo de vida para los franciscanos. Sus preceptos eran una vida basada en el amor, la oración y la paz; votos de pobreza completa, lo que incluía renunciar a las propiedades; sustento del propio trabajo o, en caso necesario, de la limosna; y ofrecer ejemplo de renuncia de sí mismo. Viajó a Roma con sus once compañeros para reunirse con el Papa Inocencio III y consiguió la aprobación verbal de la Regla. La pequeña fraternidad escogió la Porciúncula como el primer hogar de la Orden. En marzo de 1212, la noche del Domingo de Ramos, fue consagrada Clara, dando inicio a la II Orden Franciscana, también llamada Clarisas o Damas Pobres. Ese mismo año, Francisco se embarcó rumbo a Siria para continuar su obra apostólica en Oriente, pero los vientos contrarios hicieron fracasar su viaje y regresó. Los años siguientes viajó por Italia, Francia y España. El 14 de mayo de 1217, durante Pentecostés, se celebró en la Porciúncula el primer Capítulo General, junta para organizar a sus seguidores en provincias y señalar lugares específicos de misión. La Orden se dividió en doce provincias.

En 1219 consiguió viajar a Oriente, donde fue recibido por el sultán de Egipto, pero tuvo que regresar apresuradamente a Italia debido a problemas surgidos entre sus seguidores. En 1220 se retiró del gobierno de la Orden y nombró como su Vicario a Pedro Catan. En 1221 fundó la III Orden, conocida como Terciarios, a la que podían pertenecer quienes estuvieran ligados a ocupaciones civiles, estuvieran casados o simplemente no pudieran seguir la I Orden por razones de vocación o enfermedad. Ese mismo año, la organización eclesiástica le solicitó que la Regla escrita hace once años (llamada primera Regla) fuera nuevamente redactada, más breve. La Regla definitiva fue aceptada por el Capítulo de Pentecostés (junta de religiosos) y aprobada y confirmada mediante bula (documento eclesiástico) por el papa Honorio III.


 En 1224, Francisco pasó la cuaresma de San Miguel en el monte La Verna (en los Montes Apeninos, Italia), con el fin de hacer penitencia. Allí recibió en su cuerpo las Llagas(estigmas o señales) de la Pasión de Cristo. En ese tiempo también tuvo una grave afección a los ojos que lo dejó casi ciego, pero pese a su condición continuó predicando. En 1226, su estado de salud siguió empeorando progresivamente y fue trasladado a Asís. Al sentir cercana la muerte, pidió que lo llevaran a la Porciúncula.


El sábado 3 de octubre de 1226, hacia las 19 horas, murió a la edad de 44 años. Al día siguiente, domingo 4 de octubre, su cuerpo fue trasladado a Asís y sepultado en la iglesia de San Jorge. El 16 de julio de 1228, el Papa Gregorio IX canonizó a Francisco de Asís y se convirtió en Santo.